El encuentro entre San Luis y Querétaro fue detenido en medio de una trifulca violenta que protagonizaron los aficionados desde las gradas.
Testigos del evento deportivo aseguran que fueron seguidores de los gallos, quienes por cierto llevaban la ventaja en el marcador (2-0), los que comenzaron las agresiones aventando monedas y encendedores.
Posteriormente, en el segundo tiempo las cosas se tornaron aún más violentas cuando una butaca le calló a una menor de edad en la cabeza, la cual sufrió una conmoción por el golpe.
Los espectadores tuvieron que desalojar el lugar bajando a la cancha, puesto que por las gradas era demasiado peligroso.