En días recientes Emiliano Zapata ha encabezado los titulares de los medios de comunicación, todo a causa de una pintura en la que se le ve montando a caballo desnudo, usando un sombrero rosa y tacones.
La obra ha causado opiniones divididas, desde quienes la descalifican por considerarla irrespetuosa hasta los que la apoyan escudándose en la libertad de expresión.
Hay una delgada línea entre ejercer el derecho a expresarse y faltarle al respeto a alguien más con el fin de exponer nuestras ideas; en mi muy particular punto de vista, este hecho cruza esa línea.
Yo entiendo la molestia de la familia de Zapata porque es la misma que sentiría yo si fuera un familiar mío al que se hubiera ridiculizado con fines de “igualdad”.
El usuario @Sirako defendió la polémica pintura y lanzó la campaña “Dibuja a Zapata gay”, invitando a los ilustradores a unirse para “hacer enojar” a la familia del Caudillo del Sur.
Hasta el momento varios artistas se han sumado a la causa, y es que afirman que enojarse por la transformación de la imagen de Zapata es “machista”.
Entonces, apreciable lector, si usted es de los que piensa que la molestia por esta obra es violar la libertad de expresión . . . ¿Por qué en lugar de utilizar a Emiliano Zapata no hace “una imagen gay” con su propio rostro? O con el de su papá, su abuelito o hasta su tío, si al fin de cuentas no tiene nada de malo, ¿o sí? Mi propuesta es la siguiente: Aquí está la pintura de Emiliano Zapata sin su cara para pueda poner la suya o la de algún hombre de su familia, ¿Acepta el reto?